La piedra de los compadres es un atractivo turístico que se encuentra en las afueras de Esquipulas. Atrae a muchos visitantes nacionales como extranjeros. El principal atractivo de de la piedra de los compadres es la forma poco común que presenta con dos enormes rocas colocada una sobre otra en perfecto equilibrio y que a pesar del transcurso de el tiempo y diversas condiciones climáticas las piedras permanecen sin moverse.
Estas rocas tienen aproximadamente una altura de 3 metros y un peso de 50 toneladas.
Creencias y Rituales
Gran numero de sacerdotes mayas acuden a este monumento y realizan ritos religiosos, queman velas o hacen ofrendas a la piedra, a la que atribuyen poderes divinos.

Leyenda de la piedra de los compadres
Cuenta la leyenda, que los padrinos de un niño peregrinaban a la basílica de Esquipulas para venerar al Cristo Negro de Esquipulas. Sus corazones no siendo tan puros como el Señor hubiera deseado y sus almas no inmunes al pecado, caminaron entre Quezaltepeque y Chiquimula.
El día estaba respirando sus últimos alientos y la noche comenzó a derramar su oscuridad sobre la tierra. Los pájaros cantaban y se dirigían a sus nidos, y los pinos llenaban el aire con una brisa fresca y vigorizante.
El magnífico entorno hizo que los padrinos sintiendo que su juventud se desvanecía o simplemente siendo arrastrados por el esplendor de la naturaleza rompieran el solemne vínculo que los unía.
Él la besó en ese lugar paradisíaco donde pasarían la noche y ella, desconcertada por la belleza de la noche, se rindió a sus avances y se entregaron al pecado. Para ello, se convirtieron en piedra como castigo de su pecado cometido.
¿Cómo llegar a la piedra de los compadres?
Para llegar a este atractivo turístico de debes de conducir por aproximadamente 2 kilómetros por la antigua carretera entre Esquipulas a Quetzaltepeque pasando por la Aldea Belén donde se encuentra dicho atractivo.